Aria de John Cage
ARIA
de John Cage
Acción de Inicio
Intérprete: Alejandra Radano
Con la colaboración en el abordaje de la obra de Francesca della Monica y Ezequiel Menalled
Pieza de bravura que evoca el tradicional número de lucimiento operístico, Aria es también una delicada indagación sobre los límites de la indeterminación. La composición de Cage propone un balance entre aspectos rigurosamente definidos y otros librados por completo al criterio del performer. Dedicada y compuesta en 1958 para Cathy Berberian, quien la estrenó al año siguiente, la obra puede ser ejecutada por una voz de cualquier género y tesitura. Además, puede interpretarse como solo en forma completa o parcial, de manera autónoma o combinada con Fontana Mix –una obra electrónica– o con la totalidad o alguna de las partes del Concierto para piano y orquesta.
El “texto” de Aria se compone de vocales y consonantes aisladas, así como de palabras y locuciones variadas: una trama plurilingüe en la que se reconocen cinco idiomas (inglés, francés e italiano, pero también ruso y armenio). La partitura consta de veinte páginas de música anotada gráficamente y puede considerarse una obra de arte autónoma. En lo fundamental, la notación se compone de líneas onduladas de diversos colores y dieciséis cuadrados negros que simbolizan ruidos vocales “no musicales”. Los diez colores remiten a diferentes estilos de ejecución vocal, que son determinados convencionalmente por el performer antes de la actuación. (La tabla de Berberian sentó un precedente insoslayable, pero no comprometedor.) Aunque cada carilla equivale a treinta segundos de interpretación, ese tiempo puede contraerse o expandirse a piacere. También la dinámica y articulación quedan a criterio del intérprete, mientras que las alturas se sugieren de manera aproximada.
Foto Claudio Larrea
ALEJANDRA RADANO, en su temprana juventud, estudió piano en el Conservatorio de Música “Julián Aguirre” de Banfield, y a partir de una obra programática de Juan Francisco Giacobbe comenzó a educarse en el canto (sigue haciéndolo hasta el día de hoy con Marcelo Velasco Vidal).
Debuta teatralmente en el Luna Park con el Musical Argentino: “DRACULA” de Pepe Cibrián Campoy. Luego asume los roles principales de los Clásicos de la Comedia Musical Americana: “CATS”, “BEAUTY AND THE BEAST”, “CHICAGO” y “CABARET”.
Debuta en Paris en el Teatro Nacional de Chaillot con “CONCHA BONITA” dirigida por Alfredo Arias con música de Nicola Piovani.
Interpreta a Polly Peauchman en “LA ÓPERA DE TRES CENTAVOS” de Bertolt Brecht & Kurt Weill y en junio del 2003 es invitada al Festival Internacional de Tango en París. En Alemania, del compositor argentino Jorge Zulueta canta en su Ópera de Cámara “TANGO MON AMOUR”.
“LA INHUMANA” música sintética, es su primer ejercicio de creación autoral junto al músico Diego Vila y al iluminador Gonzalo Córdova.
Jean Michel Ribes, director del Teatro de Rond Point, la convoca para la opereta “RENÉ L’ENERVÉ” y junto al compositor Bruno Coulais participa en “EL TIGRE” Sainete Espacial dirigida por Alfredo Arias.
El sello Lantower edita los cds “DELIRIO GAUCHO” Canciones del Interior y “TRES DRAMAS PARA ORQUESTA” Exploraciones del teatro musical.
Debuta en el cine con un protagónico en blanco y negro, rodado en 8mm y 16mm “FANNY CAMINA” film sobre el sujeto Fanny Navarro dirigida por Ignacio Masllorens y Alfredo Arias, ganadora del premio al público en el 30°Festival de Biarritz, Francia.
Realiza su primer Jean Genet en el Teatro Athénée de Paris, y en la Fundación Proa, actúa el Monólogo “HELLO ANDY?” dialogo Imaginario entre Andy Warhol y Joan Crawford, ambas dos dirigidas por Alfredo Arias.
En la sátira de Gonzalo Demaría “HAPPYLAND” ofrecida en el Teatro General San Martin, evoca a María Estela Martínez de Perón, más conocida como Isabelita.
Sus referentes en el canto son Cathy Berberian, Berta Singerman, Nina Hagen y Galina Vishnevskaya.
En este 2021 recibió el Premio Kónex de Platino y el Ministerio de Cultura de Francia la condecoró con la insignia "Chevalier de l'Ordre des Arts et des Lettres”.
“La invitación a interpretar ARIA de Cage llega en este momento de mi vida como un premio en sí mismo, para el que dispondré de todos mis eufemismos vocales en beneficio de una obra, que, para mí, resume conceptualmente, el intrincado oficio de la Intérprete de Teatro Musical”.
ALEJANDRA RADANO